Islas Orcadas, Escocia – Corazón neolítico


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Las islas Orcadas, en inglés y escocés Orkney y en gaélico escocés Arcaibh, son un conjunto islas al norte de Escocia habitadas desde hace mas de 8.500 años. Su patrimonio arqueológico de origen neolítico es de los mejores conservados de Europa. Acompáñanos al viaje al corazón neolítico de las Orcadas, donde descubriremos los misterios que rodean estas maravillas, un rincón olvidado del tiempo, donde los ecos del pasado resuenan con fuerza.

UBICACIÓN

Las Islas Orcadas son un archipiélago ubicado en el norte de Escocia, en el Mar del Norte. Se encuentran aproximadamente a 16 kilómetros al norte de la costa de Escocia continental y al este de las Islas Shetland. Las Orcadas están formadas por unas 70 islas e islotes, aunque solo alrededor de 20 de ellas están habitadas.

HISTORIA DE LAS ISLAS ORCADAS

Los primeros grupos humanos llegaron a las Islas Orcadas a finales del Mesolítico, probablemente alrededor del 6.500 a.C. Cruzando en pequeñas embarcaciones desde la costa de las islas británicas, estas primeras poblaciones subsistieron de la caza y la recolección. Hacia el año 4.000 a.C., las ideas neolíticas llegaron a las islas, trayendo nuevos conocimientos en el uso de la piedra, la ganadería y la agricultura. Se establecieron las primeras poblaciones estables que construyeron viviendas de piedra cerca de la costa y se dedicaron a la cría de ovejas y cerdos, así como al cultivo de la cebada y el trigo. El marisqueo y la caza complementaron su alimentación.

Hacia el siglo V a.C., las islas fueron habitadas por tribus celtas. Los pictos se organizaron en pequeñas poblaciones que se protegían de los enemigos mediante pequeñas torres de piedra llamadas Brochs. Cuando el Imperio Romano comenzó la conquista de Britania en el año 43 d.C., las Islas Orcadas se sometieron al emperador Claudio. Aunque Roma realizó diversas expediciones a las islas, nunca ejerció un control sobre el territorio, retirándose a los muros de Adriano y Antonino. En el siglo VI d.C., la tribu celta de los escotos se apoderó de las islas, pero pronto los habitantes se liberaron de su dominio.

En el siglo VIII d.C., el explorador vikingo Ragnar Lodbrok llegó a las Islas Orcadas. Los vikingos utilizaron las Orcadas como base para incursiones de saqueo en las islas británicas. Diferentes caciques controlaron las islas en una lucha de poder hasta que en el siglo XII d.C. se establecieron como parte del Reino de Noruega bajo el reinado de Haakon IV. Pronto, las Orcadas se convirtieron en objeto de hostilidades entre el reino de Noruega y el de Escocia, hasta que en el año 1.472 d.C., el rey Cristian I de Noruega comprometió a su hija Margarita con Jacobo III de Escocia y, al no poder entregar la dote prometida a tiempo, cedió las Islas Orcadas a la corona escocesa.

A pesar de integrarse con el Reino de Escocia, y por tanto en el Reino Unido, las islas han mantenido su legado y tradiciones nórdicas. Hoy en día, las Islas Orcadas son un lugar de belleza natural incomparable y un importante centro de investigación arqueológica. Su rica historia y cultura única continúan atrayendo a viajeros y amantes de la historia, ofreciendo una experiencia enriquecedora en el corazón de un legado milenario.

El conjunto de yacimientos, denominado el Corazón Neolítico de las Orcadas, ha sido designado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

QUÉ VER EN LAS ISLAS ORCADAS

La visita a los yacimientos de las Islas Orcadas puede realizarse de diferentes maneras. Hay empresas que realizan viajes en autobús organizados donde se encargan tanto del ferry a las islas como de las visitas. Por otro lado existe la opción que hemos realizado nosotros de coger el ferry y hacer las visitas por nuestra cuenta. Para ello es recomendable pasar al menos dos jornadas en la isla Mainland, la isla principal.

El Explorer Pass permite acceder a todos los yacimientos de las Islas Orcadas y a gran cantidad de los castillos de Escocia. Si vas en familia adquiere el pase familiar, y si vas mas de una semana contempla el pase anual, puede llegar a salir mejor que dos pases semanales.

Es importante comentar que el túmulo de Maeshowe solo permite el acceso con un guía y reserva previa con plazas limitadas. Aunque siempre esta la opción de ir al Maeshowe Visitor Centre para comprobar si quedan plazas. La visita parte de allí en un autobús. El sitio de Skara Brae permite mas visitas, aunque es recomendable reservar la visita.

El acceso con carro o silla de ruedas esta limitado algunos lugares por su propia geografía, pero en algunos lugares como Skara Brae hay vehículos adaptados para los visitantes con problemas de movilidad.

Los puntos más interesantes para la visita son:

Skara Brae

Skara Brae es una antigua aldea neolítica, datada alrededor del 3,100 a.C., es un testimonio excepcional de la historia humana, convirtiéndola en una de las comunidades más antiguas de toda Europa.

El descubrimiento de Skara Brae en el año 1850 d.C. ocurre después de una feroz tormenta, las fuerzas de la naturaleza revelaron las misteriosas ruinas de esta antiquísima aldea que yacían ocultas bajo la arena y el suelo. Desde entonces, Skara Brae ha capturado la imaginación de personas de todo el mundo, ofreciendo una ventana única hacia la vida cotidiana de nuestros antepasados neolíticos.

Las ocho casas que componen Skara Brae son un asombroso ejemplo de la ingeniería neolítica. Construidas con piedras de gran tamaño y cubiertas por hierba, estas viviendas demostraron su resistencia frente a las inclemencias climáticas de la época, y han perdurado a través de los milenios. Cada casa cuenta con una entrada a través de un pasillo largo y estrecho que conduce a una serie de habitaciones, cada una con su función específica. Muebles de piedra, como camas y bancos, así como herramientas y objetos de uso cotidiano, revelan la destreza y creatividad de nuestros antiguos ancestros.

En el centro de interpretación disponen de una replica de la mayor de las cabañas donde se puede interactuar y observar los objetos cotidianos

Además de explorar el asombroso Skara Brae, la entrada nos brinda la oportunidad de visitar Skaill House. Esta magnífica mansión señorial escocesa data del siglo XVII d.C y jugó un papel crucial en las excavaciones de Skara Brae.

Skaill House evoca el esplendor de la nobleza escocesa del siglo XVII. Al adentrarnos en sus salones decorados con exquisitos detalles, nos sentimos transportados a una época de opulencia y sofisticación, donde la alta sociedad de las Orcadas vivía y celebraba con gracia y distinción.

El interior alberga una notable colección de objetos históricos y mobiliario de época, que nos cuentan historias de intrigas, amores y conflictos que han dado forma a la historia de esta región. Al pasear por sus salas ricamente decoradas y admirar las antigüedades cuidadosamente conservadas, podemos imaginar cómo era la vida cotidiana de la aristocracia escocesa.

Birsay Earl’s Palace

Este enigmático lugar alberga las evocadoras ruinas del palacio de Robert Stewart, un personaje histórico notable y medio hermano de la célebre María, reina de Escocia. A fines del siglo XVI d.C., Stewart ascendió al título de conde de las Orcadas, y su residencia, aún en ruinas, nos habla de una época de intrigas y poder en las Islas Orcadas.

Las ruinas del palacio revelan un intrigante complejo que incluye un imponente castillo y un elegante patio, que aún conservan vestigios de su grandiosidad pasada. A través de los siglos, el tiempo ha dejado su marca en estas piedras, pero aún así, su esencia y esplendor histórico se perciben en cada rincón.

El palacio de Robert Stewart se convierte en una ventana hacia el pasado, permitiéndonos imaginar la vida de aquellos que caminaron por estos pasillos y salones llenos de esplendor. Cada piedra y muro cuenta una historia, y nos transporta a una época en la que el poder y la ambición se entrelazaban en una danza cautivadora.

El palacio de Robert Stewart, a pesar de su estado en ruinas, sigue siendo una pieza importante del patrimonio histórico de las Orcadas y un testimonio de la grandeza que una vez adornó estas tierras. Es un recordatorio elocuente de la historia compartida entre Escocia y las Orcadas, y cómo la influencia de figuras prominentes dejó una huella perdurable en la región.

Brough de Birsay

El islote de Birsay se convierte en un lugar mágico y accesible cuando la marea se retira, revelando un pequeño camino de cemento que nos permite adentrarnos en un fascinante viaje en el tiempo. Aquí, entre la bruma del pasado, se despliegan las ruinas de un antiguo asentamiento, testigos silenciosos de las civilizaciones que alguna vez poblaron este lugar.

Este enigmático islote alberga una rica historia, que se despliega ante nuestros ojos al explorar las ruinas de un monasterio cristiano primitivo. También podemos imaginar cómo fue la vida de los intrépidos vikingos que habitaron aquí, al observar las ruinas de su antigua residencia, que revelan detalles de su modo de vida y cultura.

Además de sus connotaciones religiosas y habitacionales, este lugar encierra secretos de defensa y estrategia. Los vestigios de estructuras defensivas, como murallas y fosos, nos hablan de una función militar y estratégica que el islote tenía en el pasado. Es como si las antiguas piedras nos contaran historias de valentía y tácticas de protección, evocando la imagen de guardianes que vigilaban con determinación las aguas circundantes.

Cuidado que no te pille la marea en el islote. Los lugareños avisan que nadie podrá ir a rescatarte hasta que baje la marea.

Broch of Gurness

El Broch of Gurness, una imponente estructura construida alrededor del 200 a.C., nos traslada en el tiempo hacia la época de la cultura picta. Durante su uso, aproximadamente entre el 200 a.C. y el 100 d.C., este broch cumplió un papel crucial como una fortificación defensiva, protegiendo a sus habitantes de posibles ataques y conflictos que acechaban en aquellos tiempos.

Este asombroso broch, testimonio vivo de la maestría arquitectónica de los antiguos pobladores, permitía a sus habitantes observar el horizonte y anticipar cualquier amenaza que se aproximara. Su estructura de piedra, con gruesos muros y pasadizos intrincados, brindaba un refugio seguro y estratégico para la comunidad picta que buscaba preservar su bienestar y modo de vida.

Aunque su uso fue breve, el Broch of Gurness dejó una huella imborrable en la historia de las Orcadas. Es un recordatorio perdurable de las habilidades técnicas y el ingenio que caracterizaban a la antigua sociedad picta, y un vínculo tangible con las vidas y creencias de aquellos que poblaron esta tierra hace siglos.

Al visitar el Broch of Gurness, un pequeño centro de interpretación nos sumerge en una apasionante narrativa sobre la historia y el significado de este intrigante sitio. A través de exposiciones y material informativo, podemos comprender mejor la vida cotidiana de los antiguos habitantes pictos, sus prácticas culturales y su relación con el entorno natural que los rodeaba.

Cuween Hill Chambered Cairn

Al ascender por un pequeño y pintoresco sendero, nos encontramos con una impresionante joya arqueológica: un túmulo funerario neolítico que se yergue en la ladera de Cuween Hill, cerca de Finstown, al oeste de la ciudad de Kirkwall. Este monumento megalítico es un testimonio excepcional de la arquitectura funeraria de la época y nos brinda una de la vida y las creencias arraigadas en las comunidades neolíticas que poblaron esta región hace miles de años.

Para acceder nos adentramos a través de un angosto túnel, que nos invita a gatear como si cruzáramos un umbral hacia una dimensión ancestral. En el interior, actualmente diáfano, se encontraron en las cámaras restos humanos y huesos de animales, lo que sugieren que este túmulo tenía una función ritual, tal vez destinada a honrar a los difuntos o a establecer un vínculo espiritual con la naturaleza y los seres queridos.

Al salir de la cámara funeraria una bella estampa se despliega ante nuestros ojos. Las vistas panorámicas abarcan la serena belleza del paisaje circundante, transportándonos en el tiempo mientras imaginamos cómo fue la vida cotidiana de las antiguas comunidades neolíticas que contemplaron estas mismas colinas y valles.

Bishop’s and Earl’s Palaces

El Palacio del Obispo de Kirkwall, también conocido como el Bishop’s Palace, se alza como un tesoro histórico y arquitectónico en la ciudad de Kirkwall. Construido en el siglo XII  d.C. por el obispo Guillermo el Viejo, este palacio medieval ha sido testigo de los cambios y eventos que han marcado la rica historia de las Islas Orcadas a lo largo de los siglos.

Con sus muros de piedra y sus elegantes detalles arquitectónicos, el Palacio del Obispo es un testimonio vivo del esplendor y la importancia de la Iglesia en la región durante la Edad Media. Durante siglos, este lugar fue el centro del poder eclesiástico y una residencia de prestigio para los obispos que gobernaron la diócesis de las Orcadas.

Hoy en día, el Palacio del Obispo es una joya histórica bien conservada y abierta al público. Los visitantes pueden explorar sus diversas estancias y admirar sus impresionantes características arquitectónicas, como sus arcos góticos, ventanas decoradas y chimeneas de piedra tallada. A través de exposiciones y paneles informativos, se desvela la historia de este palacio y su papel en la evolución de las Orcadas a lo largo de los siglos.

Maeshowe

Al llegar al centro de visitantes de Maeshowe, nos adentramos en un viaje en el tiempo reservando nuestro asiento en un pequeño autobús. Guiados por un experto, nos dirigimos hacia el antiguo túmulo neolítico que alberga una cámara funeraria de aproximadamente 4,800 años de antigüedad. Este asombroso monumento, datado alrededor del 2800 a.C., es un testimonio del ingenio arquitectónico de las antiguas civilizaciones.

A medida que nos adentramos por el largo pasillo, podemos sentir la mística que envuelve este lugar sagrado. Imaginar la sombra proyectada por una roca ubicada a unas decenas de metros crea una atmósfera misteriosa mientras avanzamos hacia el interior del túmulo. Finalmente, emergemos en un espacio diáfano que parece ocultar secretos. Aquí, en las paredes de la cámara funeraria, nos encontramos con una sorpresa fascinante: una serie de pictogramas vikingos tallados a cuchillo.

Estas enigmáticas inscripciones, dejadas por los vikingos del siglo XII, nos cuentan la historia de su paso por este lugar, liderados por el legendario Ragnar Lodbrok y sus hijos. Es como si las paredes de Maeshowe fueran un testigo silencioso de su presencia en las Orcadas, inmortalizando sus hazañas.

En Maeshowe, la historia de diferentes épocas se entrelaza, desde sus orígenes neolíticos hasta la era vikinga, brindándonos una oportunidad única para explorar el pasado y comprender la rica y diversa historia de las Islas Orcadas.

Standing Stones of Stenness

El enigmático Standing Stones of Stenness emerge como un testimonio del pasado, compuesto por 3 imponentes piedras verticales que formaban un círculo mayor ya perdido. Aunque el tiempo y la historia han dejado su huella en este sitio ancestral, estas piedras continúan en pie, erguidas como testigos silenciosos de una era remota. Con aproximadamente 5 metros de altura, estas piedras se disponen en un diámetro de unos 30 metros.

La misteriosa datación de alrededor del 3,100 a.C. nos transporta a un pasado lejano, cuando estas piedras fueron erigidas con una finalidad profunda y espiritual. Se cree que este antiguo círculo de piedra estuvo imbuido de significado ceremonial y religioso, sirviendo como lugar de encuentro para actividades rituales y eventos astronómicos que conectaban a las comunidades neolíticas con los ciclos celestiales y la naturaleza.

Las Standing Stones of Stenness, con su imponencia y simbolismo, nos invitan a reflexionar sobre el papel sagrado que desempeñaron en la vida de nuestros ancestros. En un tiempo donde la conexión con lo espiritual y lo cósmico era una parte esencial de la existencia humana, este sitio arqueológico representaba un vínculo entre el cielo y la tierra, una puerta hacia lo desconocido y lo divino.

Aunque solo algunas de las piedras permanecen en pie, el legado de las Standing Stones of Stenness perdura como un recordatorio de la esencia humana de buscar significado y trascendencia.

Ring of Brodgar

El místico Anillo de Brodgar se erige como un tesoro arqueológico inigualable, un monumento megalítico que deja sin aliento a quienes lo contemplan. Conformado por un círculo impresionante de 27 grandes piedras verticales de arenisca, cada una alcanzando alturas de hasta 4,8 metros, esta maravilla antigua se despliega majestuosamente en un diámetro de aproximadamente 103 metros. Su presencia imponente y misteriosa enmarca un entorno natural espectacular, acunando este tesoro entre dos serenos lagos, lo que lo convierte en una sinfonía visual de asombro y enigma.

El enigmático Ring de Brodgar, que data del período neolítico, se alza con orgullo como un monumento de asombrosos 4,500 años de antigüedad, resistiendo los embates del tiempo y conservando su grandeza a lo largo de milenios.

Su construcción meticulosa y su propósito exacto han sido objeto de debate y especulación entre los arqueólogos. Se cree que este círculo de piedras megalíticas albergaba una función ritual y ceremonial de gran importancia para las comunidades neolíticas que habitaban la región. Su diseño y su ubicación estratégica en medio de un paisaje natural único sugieren que este sitio ancestral tenía un profundo significado espiritual, posiblemente conectado con los ciclos celestiales y la veneración de las fuerzas de la naturaleza.

Para facilitar la visita hemos creado este mapa para dispositivos móviles con los puntos descritos en el artículo.

Visita nuestra sección Sobre los mapas para saber cómo utilizar este mapa desde tu dispositivo móvil.

CÓMO LLEGAR

Para llegar a las Islas Orcadas, hay varias opciones dependiendo de tu ubicación y preferencias de viaje. Aquí te presento algunas formas comunes de llegar a las Orcadas:

  1. Por avión: Puedes volar directamente a las Islas Orcadas desde algunos aeropuertos principales en Escocia, como el Aeropuerto de Edimburgo, el Aeropuerto de Glasgow o el Aeropuerto de Aberdeen. Los vuelos a las Orcadas aterrizan en el Aeropuerto de Kirkwall, que es el principal aeropuerto de las islas.
  2. Por ferry: Otra opción es tomar un ferry desde el continente de Escocia. Los ferris operan desde diferentes puertos, como Scrabster, cerca de Thurso, y Aberdeen. Los ferries ofrecen una forma escénica de llegar a las Orcadas y también pueden transportar vehículos.
  3. Por crucero: Algunos cruceros incluyen a las Islas Orcadas en sus itinerarios. Puedes explorar las Orcadas como parte de un recorrido más amplio por las islas británicas o Escandinavia.
  4. Por carretera y ferry: si estás conduciendo desde el continente de Escocia, puedes tomar un ferry desde el puerto de Scrabster o el puerto de Aberdeen.

Es importante verificar los horarios y disponibilidad de vuelos y ferris, especialmente si viajas en temporada alta. Además, debido a la ubicación remota de las Islas Orcadas, el clima puede afectar los servicios de transporte. Siempre es recomendable estar atento a las actualizaciones y cambios en las condiciones del viaje.

ALOJAMIENTO EN LAS ISLAS ORCADAS

En las Islas Orcadas, encontrarás una variedad de opciones de alojamiento que se adaptan a diferentes presupuestos y preferencias. Aquí te mencionamos algunas de las opciones más comunes, como hoteles y posadas, los típicos Bed & Breakfast británicos y los camping para caravanas.
Booking.com

Es recomendable reservar tu alojamiento con anticipación, especialmente en temporada alta, ya que las opciones pueden llenarse rápidamente.

NUESTRA VISITA

Durante nuestra aventura, nos hemos sumergido en la riqueza de la herencia neolítica, maravillándonos con sus misterios. Hemos sido testigos de la grandeza del pasado en el Bishop’s Palace de Kirkwall y el Broch of Gurness, imaginando la vida de antiguas civilizaciones que dejaron una huella imborrable en estas tierras.

Cuando las nubes se ciernen y las lluvias danzan, no te refugies, sino más bien abraza la experiencia con valentía. Empápate con la lluvia y siente cómo el viento susurra las historias antiguas a tu alrededor. Esta tierra no solo revela su belleza bajo el sol radiante, sino que también te invita a abrazar la naturaleza indomable que forma parte integral de su carácter.

Nuestro recorrido nos ha llevado a contemplar los vínculos ancestrales entre la humanidad y el cosmos, conectándonos con la sabiduría espiritual de nuestros antepasados. En cada paso del camino, las historias del pasado han cobrado vida, y hemos sentido la emoción de descubrir los secretos que yacen bajo la superficie de estas tierras ancestrales.

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